miércoles, 23 de marzo de 2016

Amaras al señor tu Dios.


Ariel Josue 1:9




Rebeca Proverbios 31:10




Andrea Salmos 103:3





Luis Gálatas 4:7




Julia Proverbios 31:30





Feliz Marzo.




Oración al Espíritu Santo.




Los Tiempos de Dios Cronos y Kairos.






A veces ante lo que vivimos podemos pensar que Dios se ha olvidado del plan, que estamos fuera de su mirada, nos preguntamos ¿si está con nosotros por qué se demora en actuar? Otras veces nos conformamos en vivir, renunciando a los sueños, porque quizá llegamos a la conclusión de que son muy grandes y nosotros muy pequeños. Pero Dios tiene el gobierno de todas las cosas, y es Todopoderoso para hacer su voluntad…

LOS TIEMPOS DE DIOS: CRONOS Y KAIROS

“En tu mano están mis tiempos” Salmo 31:15.

Dios es el Señor y dueño de todo, y él tiene el dominio sobre los tiempos. La palabra “tiempos”, del hebreo Et, traduce: período, tiempo determinado, propicio o apropiado. Podemos decir que se refiere a un tiempo diseñado por las manos del arquitecto divino, en el cumplimiento de Sus propósitos. Él tiene el gobierno sobre los tiempos de los hombres.

Nuestro Señor es llamado también el Dios eterno, del hebreo Olam: eterno o eternidad. El tiempo está contenido en la eternidad, como en algo de donde recibe su ser y su unidad. La eternidad es la que fundamenta el tiempo, la fuente desde donde éste mana incesantemente y lo que le da sentido (algo así como que la eternidad es la totalidad, y el tiempo una sección). Dios tiene el gobierno de todas las cosas, por eso tengamos presente que "Todo es posible para Dios"

En el griego bíblico los términos más usados para tiempo son: Cronos y Kairos. Veamos el significado de éstas palabras:

Cronos: lapso de tiempo, duración de tiempo. Raíz de la palabra cronometro y sus derivados.
Hablamos del tiempo terrenal, que se puede medir. Dios estableció con la creación el sol, la luna y las estrellas para medir los tiempos terrenales (Gén. 1:14-18), y por eso las unidades de medida de nuestro tiempo: milenio, siglo, año, mes, día, horas, etc. Es el tiempo del hombre.

Kairos: medida correcta, ocasión, período definido, tiempo oportuno, tiempo favorable, momento señalado y preciso. Cronos marca cantidad, Kairos calidad, Rom. 5:6. Kairos es el tiempo oportuno y diseñado desde el cielo, dónde Dios interviene en la vida de los hombres de una manera sobrenatural y poderosa. Tiempo diseñado en el cielo, que se manifiesta en la tierra, para bendición de los hombres. Aquí debemos velar y estar preparados para los cambios de Dios, como "Cuando el maná dejó de caer"

En el tiempo cronos de los hombres, podemos concluir a veces, que Dios se está tardando con cierta respuesta o milagro, pero Dios sabe qué, cuándo y cómo lo hace. Por ejemplo, María, la hermana de Lázaro, dijo a Jesús: “Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto” y luego Marta la otra hermana le dijo: “Señor, hiede ya, porque lleva cuatro días”, pero Jesús dijo: “No te he dicho que si crees veras la gloria de Dios? Entonces los milagros o intervenciones divinas no ocurren cuando queremos o esperamos, sino en el kairos, es decir en el tiempo de Dios.

Reflexión final: Dios tiene todo en sus manos. Él no se tarda, y tampoco llega antes, él sabe cómo y cuándo hacer las cosas. Nosotros debemos seguirle y amarle con todo nuestro corazón, confiando en su bondad y poder.  Dios le bendiga.

Seguir a Jesús es una decisión.







Para explorar un nuevo territorio es necesario ir con un guía, de lo contrario nos podemos perder y sufrir grandes pérdidas incluso la vida. Debemos seguir las instrucciones del guía al pie de la letra, aun así él también puede equivocarse como ser humano. En cambio podemos seguir a Jesucristo el Señor depositando en él todo nuestro corazón pues él sabe muy bien a donde nos lleva… 


SEGUIR A JESÚS ES UNA DECISIÓN 

Cita bíblica: Marcos 1:16-20.

1) Jesús ve lo que nosotros no vemos (Marcos 1:16).  

Reflexión 1: Todos estaban a orillas del mar de Galilea. Ésta región era menospreciada y rechazada porque muchos de sus habitantes no eran judíos. Estaba muy distante de Jerusalén y no abundaban los centros educativos. A pesar de esto Jesús fue allí para escoger a sus primeros discípulos. Lo que quizá las autoridades de la capital rechazaban para Jesús era muy importante.      

Reflexión 2: El versículo diez y seis nos dice que Jesús “los vio”. El Señor fijó su mirada en ellos y da inicio al cumplimiento de Su plan con ellos. Jesús te vio desde antes de nacer (como se lo dijo a Jeremías: “desde antes que te formases en el vientre te conocí”), el Señor te ha visto desde tu infancia y juventud, y en el momento indicado se acercó a tu corazón y te ha llamado o te está llamando. Por amor se ha ocupado de ti, él ve claramente para que fuiste diseñado.        

2) Seguir a Jesús nos lleva a escenarios de bendición (Marcos 1:17).

Reflexión 1: Jesús transforma nuestra vida. En el caso de Simón:

Lo lleva de trabajar con peces a trabajar con personas.
De las redes a un mensaje poderoso acompañado de señales y prodigios.
Del anonimato a impactar miles y miles de seres humanos.
De la rutina a orillas del mar de Galilea a una vida sobrenatural de fe y milagros.

El Señor nos lleva a nuevos escenarios de bendición y gloria.         

Reflexión 2: La frase “Venid en pos de mí” nos lleva a hacernos varias preguntas, cuyas respuestas nos permitirán ver cuál es nuestro objetivo de vida:

¿Cuál es nuestra pasión o anhelo más profundo?
¿Cuál es nuestro deseo al despertar?
¿Qué es lo que hace palpitar nuestro corazón?
¿Nosotros vamos en pos de qué o de quién? El consejo divino es: “Vamos en pos de Jesús”.     

3) Seguir al Señor Jesús es una decisión (Marcos 1:18).

Reflexión 1: “Dejaron sus redes”. Las redes representan su trabajo, su actividad diaria, aquello de lo que dependían para subsistir. No dice la Biblia que debemos abandonar nuestro trabajo (a menos que sea ilegal por supuesto), más bien nos hace reflexionar en aquellas cosas que debemos dejar o abandonar para poder seguir a Jesús.   

Reflexión 2: “Dejando sus redes le siguieron” era para ellos necesario dejar eso atrás, pues serian un estorbo o impedimento para seguir al Señor. ¿Qué cosas debemos dejar o abandonar para seguir realmente a Jesús? ¿Qué cosas nos están estorbando para responder al llamado de Dios? pueden ser algunos obstáculos como: 

a) Amistades cuyas invitaciones nos apartan del camino de Dios.
b) Negocios deshonestos o ilegales.
c) Pecados que agradan al alma, pero hieren y lastiman el espíritu.   
d) Miedos (al compromiso, a la responsabilidad, a las dificultades propias de servir a Dios, etc).
e) Deseo de tener todas las bendiciones del Señor, sin dificultades por seguirlo.

Sin embargo Simón y Andrés decidieron seguir a Jesús. No hay mejor decisión que seguir a Aquel que nos lleva a la vida eterna, no hay mejor camino que el que nos libra del castigo y la confusión eterna. Ese camino y verdad se llama Jesucristo nuestro Señor.    

4) Rompe con el pasado malsano.    

Reflexión 1: Marcos 1:19. Es muy interesante ver el dato que la Biblia nos anexa: “ellos remedaban las redes”. Jesús mira ahora a Jacobo y a Juan su hermano quienes restauran las redes que se han roto en su trabajo diario. Era el resultado normal producido por el desgaste en su trabajo. Dios los usará restaurando miles y miles de vidas. Esto nos recuerda que las experiencias tristes y dolorosas de la vida serán restauradas por Dios para bendición y restauración de muchos.

Reflexión 2: “Redes rotas” nos hacen pensar también en daños del pasado o pérdidas sufridas. En muchas ocasiones las personas se quedan contemplando los daños recibidos y por las heridas causadas permiten la amargura y los miedos que les impiden avanzar de nuevo y pasar a otros niveles en su vida con la ayuda de Dios. No rompen con su pasado, y éste les mantiene atados o impedidos. Es necesario perdonar y renunciar a toda raíz de amargura, avanzando hacia aquello que Dios tiene planeado para nosotros.           

5) Seguir a Jesús implica renunciar a muchos “afectos” (Marcos 1:20). 

Reflexión 1: Es necesario honrar y valorar a nuestros padres, pero Dios merece y espera mayor honra, esto es obediencia. Seguramente Jesús no les dijo: “Nunca más verán a sus padres” pero ahora el primer lugar en su corazón lo ocuparía el Señor (por supuesto esto fue un hermoso proceso).

Reflexión 2: Es interesante ver que Zebedeo significa: “Dios ha dado” y “porción abundante”. Al ver además que él tenía jornaleros y trabajaba con sus hijos, podemos concluir que tenían un buen negocio y por tanto a Jacobo y a Juan les iba bien y estaban cómodos (eran los hijos del dueño), y pudo esto haber sido su argumento para no seguir al Maestro. Sin embargo lo siguieron.

Reflexión 3: Dios los usó poderosamente, llevaron el evangelio por las naciones del mundo conocido, el Señor los bendijo y les dio lugares importantes aquí en la tierra. También tendrán lugares de honra y privilegios en el cielo, por ejemplo la ciudad celestial según Apocalipsis es de oro puro, y el muro de la ciudad tiene doce cimientos cada uno es de una piedra preciosa, entre ellas zafiros y esmeraldas, dice la Biblia: “Y el muro de la ciudad tenía doce cimientos, y sobre ellos los doce nombres de los doce apóstoles del Cordero” Apoc. 21:14.

Conclusión: Dios sabe lo que hace, él sabe a dónde nos lleva. Siempre estará dispuesto para darnos nuevas fuerzas y nos alienta cada día para que avancemos siguiendo sus pisadas.  Dios le bendiga.

Créele a Dios por su palabra.








Uno de ellos, experto en la ley, le tendió una trampa con esta pregunta: "Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante de la ley?"
—Mateo 22:35–36
En la cultura de hoy tendemos a burlarnos de los abogados y de los políticos, pero a lo largo de la historia los abogados han revelado algunas de las cosas más maravillosas sobre Dios que jamás podríamos haber conocido. Moisés fue el "dador de la ley" y el apóstol Pablo fue un fariseo. Martín Lutero, el reformador, comenzó su carrera en la escuela de leyes, como lo hizo el gran evangelista Charles Finney. ¿Qué los hizo tan formidables? Leían sus Biblias como los abogados que estudian para preparar un caso, y ponían más fe en que Dios cumpliría su Palabra que en cualquier ley terrenal. Luego tomaban esas palabras y cargaban la atmósfera de verdad bíblica la atmósfera que los rodeaba. Cambiaron sus mundos por medio de lo que decían.

Tomo tu Palabra. Por lo que Jesús hizo en la cruz, sé que soy un hijo de Dios y que estoy sentado en los lugares celestiales en Cristo. Tú no retienes las cosas buenas de quienes andamos en integridad, de manera que te confío mis caminos a ti. Padre, te pido que me guíes por sendas de justicia y hagas que mis días por venir sean mejores que los anteriores. En el nombre de Jesús, amén. Dios le bendiga Casa creación.

Las promesas de Dios son para ti.






Así dice el Señor omnipotente a estos huesos: "Yo les daré aliento de vida, y ustedes volverán a vivir. Les pondré tendones, haré que les salga carne, y los cubriré de piel; les daré aliento de vida, y así revivirán. Entonces sabrán que yo soy el Señor".
—Ezequiel 37:5-6
Cuando lees la Biblia debes creer personalmente en la Palabra de Dios. Sus promesas son para sus hijos, y si le has entregado tu vida a Él como tu Señor y Salvador, eso es lo que Él es para ti. Pronuncia vida sobre tus áreas muertas: te sorprenderá lo que pueden hacer las palabras de Dios en tu boca. Si Dios lo dijo, es un hecho.

Por medio de ti todo lo puedo. Ayúdame hoy a ser más consciente de tu presencia y de tu poder en mi vida. Decreto y declaro que mi entorno es próspero, mi familia es bendecida y todas mis necesidades son suplidas de acuerdo con tus riquezas en gloria. Que el gozo, la paz, la prosperidad y el éxito abunden en mi vida como las estrellas. Tus bendiciones, Señor, me hacen rico, y todo lo que necesito para cumplir mi destino está a mi disposición cuando me hace falta. En el nombre de Jesús, amén.  Dios le bendiga  Casa Creación.

lunes, 21 de marzo de 2016

PRODÚCELO.








 Por la fe entendemos que el universo fue formado por la palabra de Dios, de modo que lo visible no provino de lo que se ve.
—Hebreos 11:3
Todo lo que ves fue hecho de lo que no se veía. Este concepto maravilloso es lo que hace de las verdades bíblicas una realidad tan fascinante. No hay nada que exista actualmente que no haya existido siempre. Eso significa que todo lo que puedes experimentar con tus cinco sentidos "fue hecho" a partir de la esfera espiritual; se manifestó por el poder de Dios, y ese es el mismo poder que actúa en y a través de ti. Digo que "se manifestó" porque así es como funciona la creación. Al saber que hay una causa para cada efecto, sabemos que algo "es" porque ya había sido "hecho". Si una cosa no es concebida en la mente y pronunciada—sin llamar a las cosas que no son como si fueran—nada de lo que hay en el mundo existiría.


Padre, alineo mis palabras con tu Palabra y mi voluntad con tu voluntad. Declaro que hoy mi visión es clara, mi misión no está obstruida, y marco una diferencia en el mundo. Decreto y declaro que tu poder se manifiesta en mi vida. Gracias por las cosas maravillosas que estás haciendo, y que seguirás haciendo en mi vida. En el nombre de Jesús, amén.  Dios les bendiga, casa creación.

Carga la atmósfera con Alabanza.







  
Tan pronto como empezaron a entonar este cántico de alabanza, el Señor puso emboscadas contra los amonitas, los moabitas y los del monte de Seír que habían venido contra Judá, y los derrotó.
—2 Crónicas 20:22
En vez de temer, Josafat entendió el plan de Dios y lo puso en acción. Creyó en la Palabra de Dios y ganó la batalla. Luego celebraron la salvación de Dios incluso antes de verla cumplida. Llenaron la atmósfera con alabanza y adoración, y cargaron el aire con el poder y la provisión de Dios, y para cuando distinguieron a sus enemigos, ellos ya habían sido derrotados.

Declaro que en ti ya soy victorioso. El pecado no tiene dominio sobre mí. Mi pasado no tiene dominio sobre mí. Soy más que vencedor por medio de ti. Nadie puede separarme de tu amor. Si tú estás conmigo, nadie puede contra mí. El enemigo no triunfará sobre mí. Tus planes y tus propósitos prevalecerán. En el nombre de Jesús, amén. Dios les bendiga. Casa creación.

Confia en Dios..





Dios a planeado para ti lo mejor.







La Biblia nos enseña que hay varios libros en los cielos, y en uno de ellos Dios escribió sus planes para de ti, desde antes de tu nacimiento. Es el Libro de los Diseños de Dios. En éste el Señor te planeó y estableció un gran propósito para tu vida y ese plan es maravilloso, por eso vemos que el salmista admirado dijo: “tú formaste mis entrañas, tú me hiciste en el vientre de mi madre… y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas formidables y maravillosas son tus obras” (Sal 139:13-16). Por eso, Dios mantiene un cuidado especial contigo, pues un día él se dedicó a planearte y diseño para ti lo mejor. 

Esto significa también una gran responsabilidad para cada uno de nosotros, y por eso debemos buscar la revelación de Dios para nuestra vida, e identificar ese plan divino y alcanzarlo, entonces Dios será glorificado, tú serás bendecido, y en esto consiste el verdadero éxito: vivir para cumplir la voluntad de Dios, hacer que esos planes de Dios se cumplan en nuestra vida, y cuando estés cansado y te sientas solo, recuerda que Dios es tu fuerza y compañía.  Dios te bendiga.

Ungidos por Dios.







Es interesante ver que en el Antiguo Testamento antes de ejercer su oficio el rey era ungido, el profeta y el sacerdote también. Desempeñar un servicio eficaz y que glorifique a Dios requiere la unción del Espíritu Santo. Por eso antes de impactar el mundo conocido Jesús dijo a sus discípulos: “Recibiréis poder cuando venga sobre vosotros el Espíritu Santo y me seréis testigos”. También nos recuerda la Biblia: “En todo tiempo sean blancos tus vestidos, y nunca falte ungüento sobre tu cabeza”. La unción de Dios te hace eficaz para desarrollar una tarea sobrenatural que honre Su nombre…     

UNGIDOS POR DIOS

La unción capacitó a Bezaleel y Aholiab para hacer una obra única (el tabernáculo en el desierto), los otros podían ayudar pero ninguno podía hacer lo que ellos hacían. La unción o poder de Dios nos hace más efectivos en el llamado o servicio. Vemos el resultado de un trabajo ungido y donde todos se complementaron, pues sirvieron a Dios desde los dones que cada uno había recibido, ellos construyeron un hermoso tabernáculo que glorificó a Dios. Tengamos en cuenta que fue construido en el desierto, lo que nos recuerda que cuando tenemos el respaldo de Dios podemos hacer su voluntad a pesar de los obstáculos o adversidades.

La unción es la esencia del poder del Espíritu Santo manifiesto sobre una persona.

Cuando el Señor Jesús se presenta en la sinagoga de Nazaret, iniciando su ministerio, lo hace enseñando el pasaje del profeta Isaías: “el Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para…”. También dice en Hechos 10: “Como Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret…”, es el Espíritu Santo quien nos equipa y capacita para llevar a cabo el plan de Dios en nuestra vida. Es un equipamiento sobrenatural para servir al Señor eficazmente, no es para la gloria de los hombres.  

Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios” Hechos 4:31.

Es muy interesante tener en cuenta que el Espíritu Santo ya se había derramado en el capítulo dos de Hechos y vuelve a ocurrir en el capítulo 4:31, lo que nos recuerda varias cosas: Dios quiere darnos más de su Espíritu, la renovación es necesaria e importante, no podemos detenernos con una sola experiencia con Dios debemos buscarlo continuamente, él nos da más de Su poder para que llevemos Su palabra. Permite que como buen pastor el Señor unja tu cabeza y te llene de su poder.   

“Dios multiplica tus fuerzas como las del búfalo y te unge con aceite fresco”

Conclusión: La unción del Espíritu Santo es una bendición de Dios para sus hijos, él desea que estemos equipados con Su poder para avanzar hacia Su plan sin temor ni desanimo, avancemos en el nombre del Señor ungidos por Dios.

Estos son apartes o fragmentos de nuestro nuevo libro, el cual puedes adquirir en: "EL LENGUAJE DEL ESPÍRITU SANTO".    Dios les bendiga.

El amor inquebrantable de Dios.






                           1 Jn 4:8 el que no ama, no ha conocido a Dios, porque Dios es amor.

 El amor de Dios es incondicional y justo.

 Oímos mucho en estos días pasados del amor en libros, revistas, T.V. y películas. Si no supieras nada, pensarías que nuestra sociedad es la más amorosa en la tierra. Sin embargo mucho del "amor" no es nada más que lujuria disfrazada de amor o egoísmo disfrazado de bondad. Pero el versículo de hoy nos dice que "Dios es amor" el carácter de Dios define el amor. Para aclarar cualquier confusión sobre el amor, necesitamos solamente ver quién es Dios. Y luego, por supuesto, necesitamos buscar amar a otros como Dios nos  ama.

 En primer lugar, el amor de Dios es incondicional y no correspondido, "Dios mostró su amor hacia nosotros en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Rom 5:8) Dios nos amó cuando éramos pecadores, cuando no teníamos justicia alguna y no lo amábamos ni podíamos hacerlo como Él a nosotros. Dios no nos ama porque lo merezcamos o porque nosotros lo amemos, sino porque es Su naturaleza amar. El amor de Dios no significa que le guiñe al pecado. Al igual que los padres terrenales, disciplina a sus hijos pecadores,  "porque el Señor al que ama, disciplina y azota a todo el que recibe por hijo" (Heb 12:6) El amor verdadero no se goza en la injusticia, la confronta. Esta clase de amor no siempre es divertido pero es el mejor "es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza, pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados" (v11)

 Debemos examinar cómo vamos nosotros en demostrar el amor. ¿Es nuestro amor incondicional o retenemos amor de aquellos que nos han herido? ¿Amamos sólo a los que nos aman? Jesús dijo: "si amáis a los que os aman ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman" (Luc 6:32) Amar a aquellos que nos aman es fácil, Cristo amó a los que tenían enemistad con Él y Él espera que nosotros amemos a nuestros enemigos también.  Dios les bendiga.

LA ORACIÓN ES UN DIÁLOGO





El que es de Dios, las palabras de Dios oye.
—Juan 8:47
La oración es, ante todo, una forma esencial de abrir la comunicación con la sala del trono de Dios. Probablemente hayas escuchado esto antes, pero tengo la esperanza de que lo veas bajo una luz más plena. La oración no es un soliloquio sino un diálogo. Si no es una comunicación a doble vía, no es oración: no que Dios no nos oiga, pero si no estamos abiertos y somos lo suficientemente pacientes para recibir las respuestas y estrategias que Él nos envía, entonces ¿para qué lo consultamos?

Padre, vengo ante ti y escucho tu voz. Abre mis oídos espirituales para que oiga con claridad. Crea en mí un corazón que sea receptivo a las cosas del espíritu. Libera descargas celestiales que me den hoy discernimiento profético y dirección. Declaro que tú tienes acceso libre y sin obstáculos a mi mente y a mi espíritu. Gracias por ser un Dios que escucha y contesta la oración. Gracias por renovar mis fuerzas durante el tiempo que paso en tu presencia. En el nombre de Jesús, amén.  Dios le bendiga.

Dios lo sabe todo.




 Salmo 147:5 Grande es el Señor nuestro y de mucho poder y su entendimiento es infinito

 Dios lo sabe todo, así que Él sabe de nuestro pecado.

 Nuestro tiempo en la historia ha sido llamado "la era de la información" las computadoras trabajan las 24 hrs almacenando información excesiva de todo tipo de conocimiento. Y este diluvio de datos está creciendo cada vez más. Sin la ayuda de la tecnología avanzada podríamos procesar e interpretar sólo una pequeña fracción de ella.

 En contraste, Dios es omnisciente, Él lo sabe todo. Nuestra escritura de hoy dice "su entendimiento es infinito" Isaías pregunta: "¿Quién enseñó al Espíritu de Jehová o le aconsejó enseñándole? ¿A quién pidió consejo para ser avisado? ¿Quién le enseñó ciencia o le mostró la senda de la prudencia? (40:13-14) La respuesta a todas esas preguntas es. "Nadie"

 Como su conocimiento es infinito, Dios nunca aprende nada ni tampoco olvida nada. Cuando tú oras, no le estás diciendo algo que Él no sepa. Simplemente Él escoge obrar a través de nuestras oraciones.

 Dios sabe cada detalle de nuestras vidas. Jesús dijo: "los cabellos de vuestra cabeza están todos contados" (Luc 12:7) Dios no necesita contarlos porque Él sabe cuántos hay de manera intrínseca. También conoce todos nuestros pensamientos (Isa 66:18) David dijo: "pues aún no está la palabra en mi lengua y eh aquí oh Jehová tú la sabes toda" (Salmo 139:4), en el mismo salmo David continúa  diciendo: "aún las tinieblas no son tinieblas para ti" (v12) No puedes esconder nada del conocimiento de Dios.

 La omnisciencia de Dios debe ser un impedimento para que pequemos. Piensa en algunos errores que cometiste de niño cuando tus padres no estuvieron cerca. Nunca hubieras hecho lo que hiciste enfrente de ellos porque no querías que te castigaran. Quizá te hayas salido con la tuya en algunas cosas, pero "Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala" (Ecles 12:14) Aunque la pena eterna por el pecado ha sido pagada por Cristo, Dios nos disciplina cuando pecamos (Heb 12:5-11) ¿Hay algo en tu vida de lo que estarías avergonzado si Dios lo supiera? Si es así, arrepiéntete, porque ¡Dios ya lo sabe!  Dios le bendiga.

Haz el bien sin mirar a quien.



 Gálatas 6:7--10 No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna. No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos. Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe.

 No nos cansemos, pues, de hacer el bien. Gálatas 6:9
 July, de 10 años, sale corriendo hacia la casa de junto cuando empiezan los relámpagos y truenos. Sabe que la ancianita que vive sola le tiene pavor a las tormentas eléctricas. Por eso, va a acompañarla y distraerla hasta que pase el mal tiempo. No lo hace porque su mamá le haya dicho que lo hiciera sino porque nota que eso  ayuda a la ancianita.


 Miguel, de 12 años, es tutor de lectura de chicos de segundo grado. Es un requisito escolar, pero para él es mucho más. Ha visto cómo dos de sus chicos han mejorado en la lectura. De pronto, ¡leen y  entienden lo que leen!


 ¿Estás buscando una manera excelente de compartir a Cristo con el mundo? Hay una manera sencilla de empezar que probablemente no te hará tener un ataque de nervios: Haz el bien sin mirar a quien.


 A lo largo de la Biblia encontramos enseñanzas acerca de hacer a otros lo que es correcto y bueno:


 • "Cada uno de nosotros agrade a su prójimo en lo que es bueno, para edificación" (Romanos 15:2).
 • "Mientras tengamos oportunidad, hagamos el bien a todos, y en especial a los de la familia de la fe" (Gálatas 6:10).
 • "No os canséis de hacer el bien" (2 Tesalonicenses 3:13).
 • "No nos cansemos, pues, de hacer el bien" (Gálatas 6:9).


 Cuando hacemos algo bueno por otra persona, le damos la oportunidad de ver al Salvador en nosotros.
 El hecho de que estamos trabajando para otra persona no significa que podemos hacerlo a medias. Los demás ven a Dios obrando a través de nosotros cuando hacemos lo bueno. Ellos también ven a Dios en nosotros cuando aprovechamos cada  situación como una oportunidad de dar lo mejor de nosotros mismos. Por ejemplo, Pablo desafió a los creyentes de Galacia de esta manera: "Así que, examine cada uno su obra, y entonces tendrá motivo de orgullo sólo en sí mismo y no en otro" (Gálatas 6:4). Dar lo mejor de ti para beneficiar a otros, provoca que ya no se enfoquen tanto en ti sino en que vean a Dios en tus acciones.


 Y esta es una verdad de la que puedes depender: Cuando usas tus dones, talentos y habilidades con el poder del Espíritu Santo, no importa cómo reaccionan los demás en el momento. ¡Dios aprovechará al  máximo tu esforzado trabajo y tu obra realizada de corazón para que acudan a él!

 
 ORACIÓN:

  Señor, abre nuestros ojos a las oportunidades a nuestro alrededor para hacer algún bien a otros, en el nombre de Jesús, amén.  Dios les bendiga.

Ninguna posición de orgullo







 Filip 2:5-6 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse

  

 La venida de Cristo a la tierra es el ejemplo más grande de humildad.

 Generalmente podemos identificarnos con lo que alguien más ha experimentado cuando pasamos por lo mismo. Incluso si no hemos pasado por lo que la otra persona, quizá podamos relacionarnos pues quizá algún día podríamos tener una experiencia similar.

 Sin embargo, es mucho más difícil comprender lo que Cristo experimentó cuando dejó su posición privilegiada a la diestra de Dios para venir a la tierra como hombre. Nunca entenderemos la magnitud de ese descenso porque nunca hemos sido y nunca seremos Dios. Pero, el pasaje de hoy presenta, como un modelo para nosotros, la actitud de Jesús al venir al mundo.

 Como un creyente lleno del Espíritu (Efe 1:3-5, 13) el Señor te ha levantado de tu pecado y te ha dado el privilegio de ser su hijo adoptivo. Él te permite reconocer y apreciar un poco más de lo que la humildad significa. Como Jesús, tendrás que descender de un nivel de exaltación cuando alcances en humildad a aquellos que no le conocen.

 Jesús puso el estándar para nosotros cuando Él no vio Su alta posición "como a cosa a qué aferrarse" Soberbia en el llamado nunca debería ser algo que tratamos como una posesión preciosa personal para explotar en nuestro propio beneficio. Esa es la actitud que esperamos ver en gente mundana de influencia. Pero no debe caracterizar a quienes pretenden seguir el estándar de Jesús. Por el contrario, si tú eres un discípulo de Cristo verás cada vez más de Su humildad en tu vida. Eso se producirá al ejercer continuamente una actitud desinteresada  hacia los privilegios y posesiones que Él te ha dado. Al no aferrarte a esos beneficios, verdaderamente ejemplificarás la actitud de Jesús cada vez más.  Dios te bendiga.

Gracia al humilde .



                       Sant 4:6...Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes

 Una persona no puede ser salva a menos de que venga ante Dios con una actitud humilde.

 El verso de hoy es un desafío y una promesa para cualquiera que no esté seguro de su salvación o que piensa que es salvo pero no alcanza la estatura de las pruebas de fe mencionadas en la carta de Santiago.  Aún los peores rasgos de carácter pecaminoso (confiar en la sabiduría humana, tener enemistad con Dios, codiciar cosas carnales y egoístas) no son problema para la abundante gracia de Dios.

 El tipo de gracia a la que Santiago se refiere aquí es simplemente la gracia salvadora. Su favor inmerecido de perdón y amor que otorgó a todo tipo de pecadores. Incluyendo dentro de ese favor está la promesa de Dios del Espíritu Santo, un entendimiento de la Palabra de Dios, el Cielo y todas las bendiciones espirituales. Tal gracia está disponible para todos los que vienen en fe a Cristo. Nada en este universo puede prevenir que la persona humilde y arrepentida verdaderamente, pueda recibir la gracia, ni la fuerza del pecado y depravación, ni el poder de Satanás,  ni la influencia de la carne, ni aún el poder de la muerte.

 La Escritura a menudo enlaza la humildad con la fe salvadora. Es por ello que Santiago citó Proverbios 3:34 (Dios se opone a los orgullosos) para apoyar su punto en el verso 6. En el Evangelio de Mateo, Jesús nos dice: "de cierto les digo que a menos que se conviertan y sean como niños, no entrarán en el Reino de los cielos" (Mat 18:3)

 Si estás confundido o tienes dudas en cuanto a tu salvación, sólo pregúntate "¿me he sometido humildemente a Dios en fe y arrepentimiento?" Si te has humillado ante Dios, ¡regocíjate! Tú eres por definición un creyente, uno de los humildes. De lo contrario, necesitas orar con la actitud del recaudador de impuestos en Lucas 18:13 "¡Dios, sé misericordioso a mí pecador!"y recibe Su abundante gracia.

  ORACIÓN

 Señor gracias por tu gracia continua que derramas sobre mí.  Amen  .

                                                                   Dios te bendiga